Tus puntajes indican que podrías estar procrastinando para dormir.
Tiendes a sumarle pensamientos negativos a una situación ya de por sí frustrante.
Parece que tu actitud es hipersensible y raras veces te satisface cómo queda tu trabajo.
Parece que te enfocas en la incomodidad que sientes y la aumentas.
enviadas directo a tu correo electrónico de parte de un orientador certificado especializado en que logres el éxito y un psicólogo conductual
os que impulsan la productividad, mejoran la concentración y funcionan específicamente para
basadas en lo último de la ciencia de la conducta. Reducirán en gran medida tus niveles de procrastinación y mejorarán tu capacidad de concentración.
que hará que tu camino sea fácil y te harán sentirte responsable
para monitorear tus avances, dejar los malos hábitos y adquirir otros hábitos nuevos y saludables
con más de 50 páginas de información con pasos claros para mejorar tu concentración y alcanzar tus objetivos.
que toca las relaciones, la carrera profesional, la motivación, la vida emocional y las finanzas.
Al comprender tu estilo de productividad, aprender los métodos correctos de productividad y enfocarte en tus fortalezas.
Enfrenta los pensamientos ansiosos cuando surjan. Elimina la sensación abrumadora que te produce fallar o quedarte atrás.
Deja atrás el poco autocontrol, la falta de perseverancia y la tendencia a priorizar el placer inmediato.
Toma decisiones con mayor facilidad, mejora las relaciones, deja de pensar de más y alegra más tu vida.
Los últimos estudios científicos confirmaron que la procrastinación para dormir interrumpe las fases del sueño y reduce la calidad del sueño en al menos un 34 %.
Algunos científicos han encontrado una correlación fuerte entre el incremento de la procrastinación y la aparición de ansiedad y depresión.
Un grupo de científicos de la Universidad de Harvard encontraron una correlación directa entre el aumento de la productividad y los niveles generales de felicidad.
Algunos científicos de Utah (Estados Unidos) demostraron que reducir los niveles de procrastinación acelera la capacidad de procesamiento de nuestro cerebro.